La persona está diseñada para seguir sus deseos, buscando el máximo placer posible y mejorando su estado emocional. A menudo, esto termina en adicción y daña el cuerpo, e incluso a veces lo destruye.
Los psicólogos modernos se enfrentan cada vez más a casos de aislamiento social y virtualización de la comunicación; por muchas razones, los problemas causados por una adaptación social deficiente pasan a primer plano.
Al mirar atrás cuando eran adolescentes, pocos podrían afirmar que en ese momento estaban completamente satisfechos con su apariencia, no envidiaban a sus amigos más atractivos y amaban su reflejo en el espejo.
El síndrome del impostor es una patología psicológica en la que una persona no puede aceptar sus logros. Analicemos las causas, los síntomas y los métodos de tratamiento de este fenómeno.
Cuando le decimos a un amigo que dice tonterías, ni siquiera imaginamos lo lejos que estamos de la verdad, confundiéndonos con los conceptos de tontería y absurdo. De hecho, la tontería es una condición mórbida, mentalmente anormal, que puede manifestarse de diversas maneras.
Con este término, el psicólogo se refería a la capacidad de la psique humana de percibir conexiones en información utópica o aleatoria y de encontrar una cuota de significado en combinaciones aleatorias y coincidencias.
Uno de los trastornos fóbicos más inusuales en psiquiatría es la antropofobia, un estado en el que el paciente tiene miedo de las personas, ya sea absolutamente todo y a todo, o bien de las personas de una determinada categoría.
La hipertimia es un estado de ánimo patológicamente elevado, caracterizado por una sensación de alegría, energía, fuerza y diversión. Al mismo tiempo, la dirección y la profundidad de todos los procesos cognitivos se reducen drásticamente.
