Las enfermedades inflamatorias del tracto gastrointestinal están muy extendidas y adquieren cada vez mayor relevancia y prevalencia. Se están convirtiendo en un problema importante que requiere una solución rápida y exhaustiva.
Un cambio en el color de las heces refleja ciertos procesos corporales. Las heces normales pueden presentar diferentes tonalidades, desde amarillentas hasta marrón oscuro.
Las heces de oveja son un trastorno peculiar del sistema digestivo humano, en el que las heces se expulsan en forma de grumos densos, fragmentados. Exteriormente, estas masas se asemejan a los excrementos de oveja.
La diarrea es probablemente uno de los acontecimientos más desagradables de nuestra vida, provoca cierto malestar y muchas veces arruina planes importantes, ocurriendo en el momento más inoportuno.
El sobrecrecimiento bacteriano del intestino delgado (SIBO) es una afección patológica causada por la colonización del intestino delgado con microflora fecal. El SIBO se acompaña de diarrea y malabsorción de grasas y vitaminas.
La delicada mucosa del tracto gastrointestinal está expuesta diariamente al peligro de dañarse por alimentos demasiado picantes o duros, no molidos suficientemente, productos químicos agresivos en alimentos y medicamentos, alcohol, patógenos y otros irritantes.
La característica clave que permite distinguir la gastritis hipertrófica de todos los tipos de inflamación de la mucosa gástrica es la proliferación patológica de células del epitelio mucoso, lo que conduce a su espesor excesivo.
En gastroenterología, el flujo de contenido desde el duodeno de regreso al estómago –a través del esfínter pilórico que los separa– se define como reflujo duodenogástrico (en latín, refluxus significa “reflujo”).
Gastropatía es un nombre general para diversas enfermedades estomacales; traducido del griego significa dolor de estómago, sufrimiento. La gastritis y la gastropatía suelen confundirse, pero en medicina son conceptos diferentes.
