El agua del grifo es una fuente de gérmenes

Casi todas las personas están seguras de que el lugar más sucio de su casa es el inodoro, pero los investigadores de California hicieron un descubrimiento inesperado: resultó que el agua corriente común esparce varias veces más bacterias dañinas en el aire, en comparación con otras fuentes, incluido el inodoro.

Las bacterias se mueven libremente por el aire de la casa, se acumulan en diversos objetos y superficies, y pueden entrar al cuerpo humano al respirar o con las manos sucias. Los microorganismos pueden penetrar en la casa de diversas maneras: en la ropa y los zapatos, a través de una ventana abierta, con las mascotas, etc. El descubrimiento de los científicos los sorprendió: el principal distribuidor de flora patógena en el hogar es el agua del grifo. Al abrir el grifo, una gran cantidad de bacterias se eleva al aire, más que desde otras superficies, incluso al tirar de la cadena del inodoro.

Según los propios investigadores, esto puede deberse a que los microorganismos tienen una mayor capacidad de penetrar del agua al aire.

Los científicos realizaron este estudio para determinar el componente bacteriano de los edificios residenciales, ya que es en casa donde las personas pasan la mayor parte de su tiempo libre. En la Universidad de California, los especialistas seleccionaron alrededor de 30 casas de las cuales tomaron muestras de diferentes superficies, objetos y mascotas. Los científicos estudiaron las bacterias presentes en inodoros, gorros de ducha, bañeras, alfombras, pisos, cocinas, ventanas, ropa y pelo de animales. También tomaron muestras de la piel de las personas que vivían en una casa en particular.

La principal pregunta que interesó a los expertos fue determinar qué superficies u objetos aportaban la mayor cantidad de bacterias al aire, y el resultado, como ya se mencionó, los desconcertó. Como demostró la investigación, la mayor cantidad de microorganismos reside en alfombras y pisos, mientras que la ventilación regular contribuyó a un aumento de la cantidad de bacterias dañinas en estas superficies.

Hablando de microbios, vale la pena señalar que los teléfonos inteligentes se han convertido en una parte integral de la vida de casi todas las personas, pero pocas personas piensan en cuántas bacterias viven en su dispositivo.

En Gran Bretaña, un grupo de expertos decidió buscar la respuesta a esta pregunta y resultó que la superficie de los teléfonos inteligentes está habitada por más microbios que el botón de la cisterna del inodoro.

Los científicos determinaron la cantidad de microbios en un smartphone de la siguiente manera: el dispositivo, utilizado al máximo para su propósito previsto, se sumergió en una solución nutritiva especial que activó el crecimiento de microorganismos patógenos. Como resultado, después de unos días, la cantidad de microbios patógenos en el smartphone aumentó significativamente.

Investigaciones posteriores demostraron que había más bacterias en el teléfono inteligente que en el baño masculino, ¡y el nivel de contaminación en el teléfono era 10 veces mayor!

Los expertos recomiendan a todos los usuarios de dispositivos electrónicos que vigilen la limpieza de sus dispositivos, especialmente los teléfonos de los niños, ya que, de lo contrario, pueden ser peligrosos para la salud, ya que pocas personas piensan que un teléfono puede ser un transmisor de infecciones. Según los expertos, usar desinfectantes especiales cada 5 a 7 días será suficiente para protegerse a sí mismos y a su hijo.