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La ingesta de calcio y zinc antes de la concepción se asocia a un menor riesgo de trastornos hipertensivos del embarazo
Último revisado: 02.07.2025
Las personas que consumieron más calcio y zinc en los tres meses previos a la concepción tuvieron significativamente menos probabilidades de sufrir hipertensión durante el embarazo en comparación con aquellas que tuvieron una ingesta baja de estos minerales esenciales, según una nueva investigación.
Los hallazgos resaltan la importancia de centrarse en la nutrición antes de la concepción, no sólo durante el embarazo, para garantizar un embarazo saludable.
“Nuestros hallazgos resaltan la importancia de la ingesta de calcio y zinc en la dieta antes de la concepción, lo cual podría reducir el riesgo de trastornos hipertensivos durante el embarazo”, afirma el Dr. Liping Lu, quien dirigió el estudio como investigador postdoctoral en la Universidad de Columbia y actualmente es profesor adjunto en la Universidad Estatal Ball. “Una mayor ingesta de zinc y calcio antes de la concepción, proveniente de la dieta y suplementos, se asocia con un menor riesgo de trastornos hipertensivos durante el embarazo”.
Lou presentará estos resultados en NUTRITION 2024, la principal reunión anual de la Sociedad Estadounidense de Nutrición, que se realizará del 29 de junio al 2 de julio en Chicago.
La hipertensión, o presión arterial alta, es uno de los trastornos más comunes durante el embarazo y puede causar daños tanto a la embarazada como al feto en desarrollo. Dados los posibles efectos adversos de los antihipertensivos durante el embarazo, los investigadores se han centrado en la posibilidad de prevenir trastornos hipertensivos peligrosos, como la preeclampsia, mediante factores modificables como la nutrición.
Si bien muchas personas comienzan a prestar atención a su nutrición una vez que quedan embarazadas, los investigadores señalaron que el estado nutricional de una persona antes de la concepción también es importante, ya que el cuerpo puede tardar un tiempo en corregir las deficiencias o los desequilibrios.
La salud de la mujer durante el período preconcepcional está estrechamente relacionada con el resultado del embarazo. Unas reservas adecuadas de nutrientes o minerales en el cuerpo antes de la concepción pueden proporcionar niveles óptimos de nutrientes para la concepción y favorecer las primeras etapas del crecimiento y desarrollo fetal, afirma el Dr. Liping Lu, profesor adjunto de la Universidad Estatal de Ball.
Los investigadores realizaron dos estudios independientes con datos de más de 7700 mujeres embarazadas en Estados Unidos que proporcionaron información sobre su salud y alimentación a través del Estudio de Resultados del Primer Embarazo: Monitoreo de Futuras Madres. Un estudio se centró en el calcio y el otro en el zinc. Los investigadores analizaron la asociación entre la ingesta preconcepcional de cada mineral y la incidencia de trastornos hipertensivos durante el embarazo, considerando factores demográficos, de estilo de vida y de salud que también se asocian con el riesgo de hipertensión.
Los resultados mostraron que las personas en el quintil más alto de ingesta de calcio antes de la concepción tenían un 24 % menos de probabilidad de sufrir trastornos hipertensivos durante el embarazo, en comparación con las del quintil más bajo. En cuanto al zinc, las participantes se dividieron en cuartiles, y aquellas con la mayor ingesta de zinc antes de la concepción tenían un 38 % menos de probabilidad de sufrir trastornos hipertensivos durante el embarazo que aquellas con la menor ingesta de zinc.
Como ocurre con cualquier estudio observacional, los resultados no necesariamente demuestran una relación causal. Sin embargo, son consistentes con otros estudios que han vinculado una mayor ingesta de ambos minerales con un menor riesgo de hipertensión fuera del embarazo. Además, se sabe que el calcio y el zinc desempeñan un papel importante en los procesos metabólicos relacionados con el mantenimiento de la salud vascular, lo que proporciona una explicación biológica plausible de por qué estos minerales pueden ayudar a prevenir los trastornos de la presión arterial.
Las Academias Nacionales de Ciencias, Ingeniería y Medicina recomiendan que las mujeres en edad fértil consuman 1.000 miligramos de calcio y 8 miligramos de zinc diariamente.