El número de muertes y enfermedades debidas a riesgos metabólicos ha aumentado desde 2000

Los últimos resultados del estudio Carga mundial de enfermedades, lesiones y factores de riesgo (GBD) 2021, publicado en The Lancet, aportan nueva evidencia sobre los problemas de salud y los factores de riesgo que los causan.

El creciente número de personas expuestas a factores de riesgo metabólico como presión arterial sistólica (PAS) elevada, glucemia plasmática en ayunas (GPA) elevada, índice de masa corporal (IMC) elevado, colesterol LDL elevado y disfunción renal demuestra las consecuencias del envejecimiento de la población y los cambios en el estilo de vida a escala mundial.

Según el estudio, entre 2000 y 2021 se produjo un aumento del 49,4% en los AVAD globales, o años de vida ajustados por discapacidad (años de vida saludable perdidos debido a problemas de salud y muerte prematura), asociados a factores de riesgo metabólico.

Durante este período, la mala salud en personas de 15 a 49 años se asoció cada vez más con un IMC elevado y una glucemia plasmática en ayunas (GPA) elevada, también conocida como hiperglucemia, lo que aumenta el riesgo de desarrollar diabetes. Otros factores de riesgo metabólico, como la presión arterial sistólica (PAS) elevada y el colesterol LDL elevado, también se situaron entre los 10 principales factores de riesgo para las personas de este grupo de edad.

"Si bien estos factores de riesgo son de naturaleza metabólica, su desarrollo a menudo puede estar impulsado por diversos factores relacionados con el estilo de vida, especialmente entre las generaciones más jóvenes", afirmó el Dr. Michael Brauer, profesor asociado del Instituto de Métricas y Evaluación de la Salud (IHME).

También apuntan a una población que envejece y tiene mayor probabilidad de desarrollar estas afecciones con el tiempo. Abordar las enfermedades no transmisibles prevenibles mediante factores de riesgo modificables representa una gran oportunidad para cambiar proactivamente la trayectoria de la salud mundial mediante políticas y educación.

El análisis de factores de riesgo de la GBD proporciona estimaciones exhaustivas de la carga de enfermedad para 88 factores de riesgo y sus consecuencias para la salud en 204 países y territorios entre 1990 y 2021. Por primera vez, el estudio de la GBD incorpora la nueva metodología de "carga de la evidencia" del IHME, que evalúa rigurosamente la evidencia que vincula los factores de riesgo, las enfermedades y las lesiones, y ofrece una perspectiva adicional para priorizar las acciones e identificar áreas que requieren mayor investigación.

La contaminación atmosférica por partículas, el tabaquismo, el bajo peso al nacer y la corta edad gestacional también estuvieron entre los mayores contribuyentes a los AVAD en 2021, con variaciones significativas según la edad, el sexo y la ubicación.

El estudio encontró que entre 2000 y 2021 se lograron avances significativos en la reducción de la carga mundial de enfermedades asociadas a factores de riesgo para la salud materna e infantil, la falta de agua potable, saneamiento e higiene de las manos seguros, y la contaminación del aire en interiores causada por cocinar con combustibles sólidos.

"Los factores de riesgo que actualmente conducen a una mala salud, como la obesidad y otros componentes del síndrome metabólico, la exposición a partículas en suspensión en el ambiente y el tabaquismo, deben abordarse mediante una combinación de políticas sanitarias globales y esfuerzos de reducción de la exposición para mitigar los riesgos para la salud y mejorar la salud de la población", afirmó la Dra. Emmanuela Gakidou, profesora de ciencias de la métrica de la salud en el IHME.

"Con la creciente exposición a factores de riesgo como la hiperglucemia, la hipertensión arterial, la baja actividad física y las dietas ricas en bebidas azucaradas, existe una necesidad urgente de intervenciones dirigidas a la obesidad y los síndromes metabólicos", afirmó el Dr. Greg Roth, director del Programa de Evaluación de la Salud Cardiovascular y profesor adjunto de ciencias de la métrica de la salud en el IHME.

"El GBD destaca que las tendencias futuras pueden diferir significativamente del pasado debido a factores como el cambio climático y el aumento de las tasas de obesidad y adicciones, pero al mismo tiempo, existe una enorme oportunidad para cambiar la trayectoria de la salud en la próxima generación", afirmó el Dr. Lian Ong, investigador principal del IHME.

Las mayores reducciones en la carga de enfermedad ocurrieron en los factores de riesgo relacionados con la salud materna e infantil, el agua no potable, el saneamiento y la higiene de las manos, impulsadas tanto por menores niveles de exposición como por poblaciones proporcionalmente más pequeñas de bebés y jóvenes.

Estas cifras demuestran que las intervenciones de salud pública y las iniciativas humanitarias de salud a lo largo de las tres últimas décadas han tenido éxito, con tasas particularmente altas de reducción de la carga asociada a estos factores de riesgo en regiones con niveles bajos en el índice sociodemográfico, medidas de ingresos, fertilidad y educación.

Se encontró una reducción significativa en la carga mundial de enfermedades asociadas a factores de riesgo de desnutrición infantil y materna, como el retraso del crecimiento infantil, con una reducción del 71,5% en los AVAD estandarizados por edad entre 2000 y 2021, y el bajo peso al nacer y la edad gestacional corta, con una reducción del 33,0% durante el mismo período.

Los autores descubrieron que, a pesar del descenso mundial, la carga de enfermedad asociada a los factores de riesgo de desnutrición infantil y materna seguía siendo alta en las superregiones de la GBD del África subsahariana, el sur de Asia, partes del norte de África y Oriente Medio, y partes del sudeste asiático, el este de Asia y Oceanía.

La carga de enfermedad asociada con fuentes de agua inseguras, saneamiento inseguro y falta de acceso a instalaciones para lavarse las manos (todos dentro de los 25 riesgos principales) disminuyó, con reducciones de AVAD estandarizadas por edad del 66,3%, 69,2% y 65,7%, respectivamente.

En cambio, la carga del tabaquismo (AVAD estandarizados por edad) ha aumentado ligeramente debido al envejecimiento poblacional, a pesar de la disminución de la exposición a este factor de riesgo. La carga de enfermedad (AVAD estandarizados por edad) asociada a la contaminación atmosférica por partículas, el IMC elevado, la glucosa plasmática en ayunas (GPA) elevada y la presión arterial sistólica (PAS) elevada ha aumentado significativamente a medida que la exposición a estos factores de riesgo ha aumentado y la población ha envejecido.

También se publicó en The Lancet un estudio de proyección de la esperanza de vida mundial para 204 países entre 2022 y 2050, que indica que es probable que la esperanza de vida mundial aumente entre 2022 y 2050.