Los científicos han elaborado una nueva teoría sobre la edad gestacional

Un bebé humano recién nacido nace menos desarrollado en términos de capacidades motoras y cognitivas que los bebés de otros primates.

Durante mucho tiempo, los científicos explicaron esto basándose en la principal característica distintiva de los humanos: el tamaño del cerebro. Un cerebro grande requiere una cabeza grande, que apenas puede pasar por el canal de parto. Por lo tanto, según los científicos, la naturaleza acortó la duración del embarazo humano para que el bebé naciera antes de que su cabeza fuera demasiado grande para un parto normal. Como resultado, el niño nace prácticamente indefenso.

Un embarazo más prolongado para dar a luz a un bebé más desarrollado habría sido posible si las mujeres hubieran tenido una pelvis lo suficientemente ancha, pero los científicos asumieron que, en este caso, los humanos, al ser animales erguidos, no habrían podido moverse con normalidad. Sin embargo, Holly Dunsworth, profesora de la Universidad de Rhode Island, duda de la validez de esta explicación, así como de toda la teoría generalmente aceptada descrita anteriormente.

Teniendo en cuenta el tamaño del cuerpo de la madre, el embarazo humano dura incluso un poco más y los bebés recién nacidos son algo más grandes que los de otros primates.

El profesor se preguntó si los procesos metabólicos en el cuerpo de las mujeres embarazadas podrían explicar el momento del embarazo humano.

Dunsworth se asoció con el experto en fisiología Peter Allison de la Universidad de Harvard y Herman Pontzer del Hunter College para estudiar el tema.

Los científicos han desarrollado una nueva hipótesis sobre la duración de la gestación en el útero de la madre.

"Nuestra teoría es que los bebés nacen cuando nacen porque en ese momento la madre ya no tiene la energía para sustentar el desarrollo embrionario del bebé. La energía de la madre es la principal limitación evolutiva, no sus caderas", afirma Dunsworth.

"Nuestro cuerpo puede quemar una cantidad limitada de calorías al día", explica Pontzer. "Durante el embarazo, la mujer alcanza ese límite y el bebé nace antes de superarlo".

Este proceso, impulsado por el metabolismo de la madre, explica por qué los bebés son indefensos en comparación con nuestros primos primates.

Otro argumento que los expertos esgrimieron a favor de su teoría fue un estudio antropológico, en base al cual concluyeron que la pelvis masculina es más adecuada para el parto que la femenina.

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