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Los hijos de padres fumadores son más propensos a la obesidad
Último revisado: 29.06.2025
Los hijos de padres fumadores tienen mayor tendencia a desarrollar obesidad. Esta opinión fue expresada por representantes de varias instituciones científicas australianas, en particular la Real Universidad Tecnológica de Melbourne y la Universidad de Monash. A ellos se sumó el personal de la Universidad Británica de Lancaster.
El tabaquismo es un indicador de pronóstico de obesidad infantil. Al mismo tiempo, científicos estadounidenses han demostrado que si los padres fuman, el riesgo de obesidad infantil aumenta un 40 %. Ya se han dilucidado las teorías más probables sobre la existencia de una relación entre el tabaquismo parental y el desarrollo de obesidad infantil.
Teniendo en cuenta los aspectos socioeconómicos del problema, según una teoría, este fenómeno puede explicarse por el coste bastante elevado de los cigarrillos, que conlleva una redistribución de los gastos familiares y una reducción del consumo de productos alimenticios más caros, pero también más útiles y de mayor calidad.
La teoría de la preferencia gustativa basada en el comportamiento explica el cambio en la sensibilidad gustativa en los fumadores, lo que puede influir negativamente de forma indirecta en la elección de alimentos poco saludables e indeseables.
Los australianos tienen una de las tasas de obesidad infantil más altas del mundo. Las estadísticas muestran que uno de cada cuatro niños tiene sobrepeso u obesidad.
En su investigación, los expertos analizaron información de cinco mil niños australianos de entre 4 y 16 años. Los datos se recopilaron a lo largo de una década para determinar el impacto del tabaquismo parental en el desarrollo de la obesidad infantil.
El trabajo de los científicos ha demostrado que los niños que tienen un padre o una madre fumador consumen grandes cantidades de alimentos de baja calidad y poco saludables, incluidas patatas fritas, salchichas, refrescos, comida rápida, en un contexto de bajo consumo de alimentos saludables (frutas, verduras, cereales, agua limpia).
Cabe destacar que la adicción al tabaco de la madre desempeña un papel importante. Esto probablemente se deba al apoyo predominantemente femenino en la vida familiar, la selección de alimentos y la preparación de los mismos. Las madres probablemente tienen una mayor influencia en la alimentación y las preferencias de sus hijos.
Los resultados del experimento señalan la importancia de desarrollar intervenciones que ayuden a los padres a abandonar las adicciones y a llevar un estilo de vida saludable. Esto, en definitiva, tendrá un impacto positivo en la salud de sus hijos. Se deben tomar medidas para que los miembros activos de la comunidad, los profesionales de la salud, los docentes y los padres estén en contacto, lo que ayudará a reducir las posibles causas de la obesidad infantil.
Los detalles se publican en la página de publicaciones de BMC Public Health.