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Un fármaco contra la malaria promete ser eficaz en el tratamiento de los ovarios poliquísticos
Último revisado: 02.07.2025
Un equipo de científicos metabólicos y biólogos moleculares del Hospital Zhongshan de la Universidad de Fudan, en colaboración con colegas de otras instituciones de China, han descubierto que algunos medicamentos antipalúdicos resultan prometedores en el tratamiento del síndrome de ovario poliquístico (SOP) en mujeres.
En su estudio, publicado en la revista Science, probaron el fármaco dihidroartemisinina (un tipo de artemisinina) en ratones y posteriormente en un pequeño grupo de mujeres con SOP. Elisabeth Stener-Wiktorin, del Instituto Karolinska, publicó un artículo de opinión en el mismo número de la revista donde describió el trabajo y sugirió que podría cambiar el tratamiento del SOP en el futuro.
El SOP es una afección en la que las mujeres experimentan un crecimiento anormal de quistes en los ovarios, lo que provoca síntomas como dolor abdominal, ciclos menstruales irregulares, crecimiento excesivo de vello, acné y, a menudo, obesidad. Los síntomas de esta afección suelen atribuirse a la producción de niveles anormalmente altos de andrógenos.
Se desconocen las causas del SOP y no existe cura, pero se han desarrollado diversas terapias para aliviar los síntomas. En este nuevo estudio, un equipo chino descubrió que la administración de un tipo de medicamentos comúnmente utilizados para tratar la malaria redujo los síntomas tanto en ratones como en mujeres.
Hace unos años, otro equipo de investigadores descubrió que administrar un fármaco llamado artemisinina a personas obesas ayudaba a convertir su tejido adiposo blanco en grasa beige, que era más fácil de quemar mediante el ejercicio. Esto llevó al nuevo equipo a pensar que estos fármacos podrían ser útiles para las personas con SOP, ya que otros estudios han demostrado una relación entre los niveles de grasa parda y el SOP.
Los investigadores primero administraron a ratones de prueba dehidroepiandrosterona, un tipo de andrógeno, para simular el SOP. Luego les administraron artemisinina y descubrieron que esta prevenía el aumento de los niveles de testosterona y el desarrollo de quistes.
Motivados por los resultados, el equipo realizó un pequeño ensayo clínico con 19 pacientes con SOP, a quienes se les administró artemisinina tres veces al día durante tres meses. Al final, 12 pacientes informaron que sus ciclos menstruales se volvieron más regulares y casi todas presentaron niveles más bajos de testosterona en sangre. Además, se redujo el desarrollo de quistes.