¿Crees que todo lo que tiene en la cabeza es sexo? ¡No es cierto!

Anteriormente se suponía que los hombres piensan en sexo con más frecuencia que las mujeres, pero un nuevo estudio ha demostrado que los hombres no están menos preocupados por pensamientos sobre otras necesidades biológicas que la mitad de la humanidad.

El estudio desacredita el estereotipo persistente de que los hombres piensan en sexo cada siete segundos, lo que equivale a más de 8.000 pensamientos sobre sexo durante las 16 horas que están despiertos.

"Es sorprendente la cantidad de gente que cree en estas estadísticas falsas, sobre todo en que los hombres piensan en sexo casi constantemente y con mucha más frecuencia que las mujeres", afirmó Terri Fisher, autora del estudio y profesora de psicología en el campus de Mansfield de la Universidad Estatal de Ohio. "Si una persona pensara en sexo 8.000 veces al día, se pensaría que padece un trastorno del deseo sexual".

El estudio, realizado por científicos estadounidenses, involucró a 163 mujeres y 120 hombres universitarios de entre 18 y 25 años. De ellos, 59 fueron asignados aleatoriamente a registrar pensamientos sobre la comida, 61 sobre el sueño y 163 sobre el sexo. La mayoría de los estudiantes eran europeos y se identificaban como heterosexuales.

Antes de comenzar la fase de registro de pensamientos, los participantes respondieron a una serie de preguntas. Estas incluían un cuestionario sexual para medir la orientación emocional positiva o negativa hacia la sexualidad (erotofilia/erotofobia); una medición sociosexual de las actitudes hacia el sexo y el seguimiento del comportamiento sexual y los niveles de deseo; y un cuestionario sobre preferencias alimentarias y somnolencia. También se les pidió que estimaran cuántas veces al día, en promedio, pensarían en el sueño, la comida y el sexo.

Los científicos entregaron a cada estudiante un dispositivo para contabilizar sus pensamientos sobre sexo. Se les pidió que contaran cualquier pensamiento sobre sexo, incluyendo cualquier tipo de actividad sexual, fantasías e imágenes eróticas, recuerdos sexuales y cualquier estímulo que les provocara excitación.

A los otros dos grupos de estudiantes se les pidió que utilizaran el dispositivo para registrar pensamientos sobre la comida, que incluían comida, hambre, comer bocadillos o cocinar; y pensamientos sobre el sueño, que incluían sueños de dormir, tomar siestas y relajarse.

"Descubrimos que no solo había diferencias de género en cómo pensaban las personas sobre el sexo, sino también en cómo pensaban sobre el sueño y la comida", dijo Fisher. "Eso significa que los hombres podrían tener más de estos pensamientos que las mujeres, o podrían tener más tiempo libre para identificarlos".

Los participantes masculinos informaron tener entre 1 y 388 pensamientos diarios sobre sexo, en comparación con 1 y 140 veces al día en el caso de las mujeres.

El promedio de veces que los hombres jóvenes pensaban en sexo era de casi 19 veces al día. Las mujeres del estudio reportaron un promedio de 10 pensamientos sexuales al día.

Los hombres también pensaban en la comida casi 18 veces al día y en el sueño 11 veces, en comparación con los pensamientos de las mujeres: 15 y 8 veces, respectivamente.

Cuando se tuvieron en cuenta todos los pensamientos en el análisis estadístico, la diferencia entre hombres y mujeres en el número promedio de pensamientos diarios sobre sexo no fue mayor que las diferencias de género entre los pensamientos sobre el sueño o la comida.