El miedo a envejecer es una fobia común en la actualidad

Una de las fobias de nuestra época es el miedo a envejecer. Los médicos incluso le han dado un término especial: gerascofobia, es decir, el miedo a envejecer. Como dicen los psicólogos, para afrontar el miedo, es necesario conocerlo mejor. Por lo tanto, antes de adentrarnos en una lucha despiadada contra la vejez, averigüemos primero: ¿a qué le tememos realmente con la gerascofobia?

Impotencia. Una de las peores pesadillas de cualquier hombre. La impotencia atemoriza a los hombres incluso más que la muerte o el cáncer. Para el sexo más fuerte, la idea de que un día no podrán hacer lo que antes era fácil es insoportable.

Debilidad. Otro temor del sexo fuerte es el debilitamiento físico. En nuestra opinión, es la fuerza física lo que hace a un hombre ser hombre. Sin embargo, por mucha fuerza física que tenga, sigue siendo incapaz de luchar contra la naturaleza y el proceso de envejecimiento.

Deterioro del pensamiento y la memoria. La demencia, o pérdida de memoria, suele asociarse con el envejecimiento, al igual que la enfermedad de Alzheimer, que es la causa más frecuente de este deterioro. Lo más alarmante es que la probabilidad de padecer estos trastornos es mayor en hombres que en mujeres.

Falta de atractivo. Las mujeres están diseñadas por naturaleza para ser criaturas hermosas, eso es un hecho. De lo contrario, los hombres perderían el interés en ellas. Lamentablemente, es raro que una mujer se vuelva más atractiva con la edad. Al perder su belleza, las mujeres pierden el sentido mismo de la existencia.

Soledad. A diferencia de la mayoría de los hombres, a las mujeres les gusta estar acompañadas. Se sienten más cómodas cuando tienen a alguien con quien charlar, hacer algo juntas o ir a algún sitio. Cuando los hijos se van solos o cuando fallece su cónyuge, las mujeres suelen deprimirse.

Oncología. A medida que las mujeres envejecen, son más susceptibles a ciertos tipos de cáncer: de ovario, de cuello uterino, de mama y de duodeno. Por esta razón, los médicos recomiendan mamografías, citologías cervicales y colonoscopias con mayor frecuencia. La necesidad de ir al hospital con más frecuencia solo aumenta el temor de la mujer a que su cuerpo se esté deteriorando lentamente.

Cuando una persona comprende mejor su miedo y sus causas, es mucho más fácil afrontarlo. Analiza qué te asusta exactamente del envejecimiento y, por fin, ¡empieza a hacer algo para retrasar este proceso! De esta manera, te asegurarás más de doce años de vida plena al afrontar la gerascofobia.

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