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Probióticos: ¿beneficios o perjuicios?
Último revisado: 02.07.2025
Los probióticos, según la publicidad, ayudan a normalizar la flora intestinal y a mejorar la digestión. Hoy en día, en las farmacias se puede encontrar una gran variedad de estos medicamentos, pero investigadores daneses intentaron determinar si las personas realmente necesitan probióticos.
En Dinamarca, un grupo de especialistas, tras un análisis exhaustivo, ha puesto en duda los tan promocionados beneficios de los probióticos. Según el profesor Oluf Pedersen, de la Universidad de Copenhague, la mayoría de los adultos sanos toman probióticos porque creen que son útiles o, al menos, inofensivos para la salud. Sin embargo, los científicos señalan que los beneficios de estos fármacos no han sido comprobados, y los eslóganes publicitarios y las promesas de los fabricantes no significan absolutamente nada.
Los expertos explicaron que los probióticos son bacterias vivas que se asemejan a los microorganismos beneficiosos que habitan en el intestino humano. Estas bacterias también se encuentran en algunos alimentos, como los productos lácteos fermentados (yogur, kéfir, etc.). Científicos daneses señalan que los probióticos se recetan para tratar algunas enfermedades del sistema digestivo, pero su efecto en el organismo de una persona sana apenas se ha estudiado. A pesar de ello, y debido en gran medida a la publicidad, muchas personas sanas han comenzado a tomar probióticos regularmente para mejorar su salud general y la digestión. Para comprender y descubrir la verdad, especialistas daneses analizaron varios ensayos clínicos. En cada estudio individual, se analizó el efecto a corto plazo de los probióticos en la microflora intestinal de una persona sana; al momento de tomar los probióticos, ninguno de los participantes se quejó de trastornos gastrointestinales y los especialistas no identificaron ninguna enfermedad en ellos; los sujetos no tomaron otros suplementos alimenticios.
Los participantes se dividieron en dos grupos: uno tomó probióticos y el otro no. Como resultado, los científicos descubrieron que quienes tomaron probióticos no experimentaron cambios significativos en la composición de la microflora intestinal. En total, especialistas daneses analizaron siete estudios, de los cuales solo uno presentó evidencia de cambios en la composición de la microflora intestinal tras el consumo de probióticos.
No hay evidencia sólida de que los probióticos ayuden a cambiar el microbioma intestinal en personas sanas, incluso si una persona consume alimentos probióticos en grandes cantidades, según uno de los autores del nuevo estudio.
Pero solo en 2013-2014, las ventas de probióticos aumentaron más de un 10% en todo el mundo, y es muy posible que los propios científicos hayan contribuido a su popularización: casi a diario aparecen artículos científicos que demuestran los beneficios de los aditivos alimentarios en publicaciones científicas y en Internet.
Los expertos daneses subrayan que las cápsulas con bacterias vivas mejoran la microflora intestinal sólo hipotéticamente y no hay ninguna evidencia científica que lo respalde, por lo que instan a tener más cuidado.
Según Pedersen, los beneficios de los probióticos se han demostrado hasta cierto punto en casos de desequilibrios de la microflora intestinal, pero si no existen desequilibrios, estos medicamentos son, en el mejor de los casos, simplemente ineficaces. Al mismo tiempo, el profesor está seguro de que los probióticos deberían estudiarse más a fondo, ya que tal vez ayuden a prevenir el desarrollo de ciertas enfermedades en personas sanas.
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